Charline et Ludovic Rohrer

En el mosaico de terruños del pueblo de Mittelberheim, la familia Rohrer cultiva desde hace nueve generaciones un amor inquebrantable por la viña. En sus 8 hectáreas de viñedos, su enfoque sigue siendo el mismo: preciso, atento y respetuoso con el mundo vivo.

Hoy en día, Ludovic está al frente de la explotación familiar, de la mano de su hermana Charline. Ambos se benefician de la presencia de André, su padre, una personalidad amable y atenta.

Su propiedad es poesía en movimiento. En este suelo margocalcáreo, las variedades de uva bailan con las brisas y las tormentas, esculpidas por la artesanía de esta familia unida. Aquí, la viticultura biodinámica no es una etiqueta, sino un modo de vida, una cuestión de rutina. La familia Rohrer cuida sus plantas y suelos con esmero y dedicación.

La bodega se encuentra debajo de la casa familiar y los vinos maduran pacientemente en viejas cubas.